En el Silencio….

Por que me gustas, por que te quiero

Por que contigo puedo reír y querer en un solo instante en un solo momento

Por que puedo desear y sonreír a la vez

Todo en un mismo momento

Por que puedo pensar y sentir todo en un mismo instante

Por que te quiero

Y quiero quererte con mi querer

Por que te siento y sentirte es encontrarse contigo y conmigo en una misma caricia.

La inspiración es el efecto de un susurro, un susurro eterno, que en la inmensidad del ser se encuentra con palabras que ya no deambulan, sino que se encausan para estar vivas en la prontitud del sonido

¿Pero pueden deambular en el silencio?

¿Pueden encausarse en el silencio?

Si el silencio es vació, es un espacio indeterminado que no tiene ni principio ni fin

Allí en el silencio las palabras son eternas

Van y vienen como bocanadas de humo que juegan a cubrirlo todo

A reproducirse en el vació, a ser uno con él

Uno con el silencio

Diremos pues que el silencio es eterno, y como las palabras que se encausan hacia ti son eternas

Transitan por las noches recorriendo caminos inciertos, atraviesan las paredes, los muros y las calles

Pero como están en el silencio y el silencio es infinito se eternizan en tu búsqueda

Te encuentran, se introducen por tus poros y se hacen eternas una vez más en el silencio de tu cuerpo, en la tranquilidad de tu piel

en la calidez de tus labios, en la suavidad de tus hombros, en la pasividad de tu vientre, en la calma de tus manos

Corren por tu sangre galopando con desespero, sin desgastarse, sin rendirse… sin fallar

Se convierten en un susurro, que en la prontitud de la consciencia se manifiestan en su efecto.